A sonreír se aprende habiendo llorado mucho. Cuando te suena demasiado cualquier principio. Cuando deja de sorprenderte cualquier final. A sonreír se empieza en cuanto se aprende a soñar flojito.

lunes, febrero 21

rehab of you

Sal a la calle y vete al primer bar que encuentres pide una copa subidita de grados y bebete todos los recuerdos. ¿Notas como arde?, ahora búscale. Si búscale a él, vete y con la excusa de que estas borracha... comele la boca, muy despacio, para que dure más. Te encanta su sabor ¿verdad?, a continuación dile con ese lenguaje de tonta, que le quieres mas que a nada y que entenderías que no quisiera volver a verte. Luego date por satisfecha, por que por lo menos no le tienes por no haberlo intentado, por no haber luchado, ¡por no haber arriesgado!

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