A sonreír se aprende habiendo llorado mucho. Cuando te suena demasiado cualquier principio. Cuando deja de sorprenderte cualquier final. A sonreír se empieza en cuanto se aprende a soñar flojito.

sábado, febrero 19

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No busco ningún príncipe, ni un superman. No busco al ken de la Barbie, ni al chico mas popular del instituto. Yo, busco a alguien como tú. Puede que no seas un principe, pero sé que me darás besos de esos de pelicula. Tampoco eres superman, pero sé que me defenderás aun que te cueste la vida. Mucho menos eres el ken de la Barbie, pero me harás sentir como una. No eres predecible y eso me gusta. Eres, tú. Y me gustas así tal y como eres. No necesito que cambies nada de ti. A veces echo de menos ser una gran parte de tu vida. Necesito tu voz a cada instante. Como decían, lunes cuesta, martes imposible sin tu voz. La verdad es que no busco nada que no seas tú. Me encantas. Todo tú. Tu, tus ojos, tu, tu boca, tu, tus gestos, tu, mi mundo. No me siento mal por quererte. Aveces me culpo, por no haberme creído antes lo que el corazón me decía. Lo único que siento es habértelo demostrado tan poco...Esto de quererte, como que es un poco locura, y sí, eso también me gusta

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