A sonreír se aprende habiendo llorado mucho. Cuando te suena demasiado cualquier principio. Cuando deja de sorprenderte cualquier final. A sonreír se empieza en cuanto se aprende a soñar flojito.

martes, mayo 10

que se joda el viento.

Porqué sé que hay algo en ti, que me tiene enganchada. No tengo ni zorra idea. Pero me gusta. Por qué se que aunque besemos otros labios o pensemos en otras personas, siempre quedará algo.

No hay comentarios: