A sonreír se aprende habiendo llorado mucho. Cuando te suena demasiado cualquier principio. Cuando deja de sorprenderte cualquier final. A sonreír se empieza en cuanto se aprende a soñar flojito.

viernes, abril 8

Miamor.

Sí, ese es mi amor. Ese que me mira a lo lejos como me peino. Él que me hace sonreír a todas horas. Él que me pone nerviosa, ese que me gusta tanto, sí, mi amor. Sí aquel chico de aspecto duro y serio. Ese que impone respeto, pero que a la vez hace el tonto por cada pasillo. Ese que me chista y mira para otro lado, que me llama y me observa detenidamente cuando ve que no le miro. Ese que me nombra a todas y cada una de las zorras que le persiguen para ponerme celosa. Sí, ese al que quiero tanto. Con el que es inevitable soñar cada día, con el que es inevitable un escalofrío en el cuerpo al mirar su foto, en pensar en que nuestros labios se podrían rozar algún día. Aquel que ocupa mi cabeza en todo instante. Ese que tiene mas defectos que cigarros se lleva a la boca. Pero ese que me hace ver que para mi es perfecto, ese al que miro con buenos ojos. Ese que para mí no tiene ni un solo defecto. Aquel de los ojos marrones verdosos que me encantan tanto...

No hay comentarios: