He intentado evitarte... en cada esquina, cada mirada, en cada cruce. Todo este tiempo te e intentado evitar, te he intentado olvidar. He intentado no saber nada de ti, por mucho que quisiese saberlo. Lo he intentado todo. Pero una vez mas, apareces tu, interrumpiendo la calma de mi vida. Volviéndote a colar en ella, en mi corazón. Y todo aquello que estaba perfecto por el momento, lo descolocas, lo destrozas a tu paso. Y te da igual dejar todo echo una mierda, por que claro, a ti no te importa nada. A veces juraría que te odio. Y no puede sonar tan mal, después de todas las noches en vela que me has tenido pensando en ti, de todas las lágrimas que he llorado a escondidas del mundo, a todas esas ilusiones... Y vuelves a abrir la herida, que parecía haber cerrado. Sigues siendo el mismo gilipollas que me roba las sonrisas, por eso hoy... no quiero seguirte el juego, no quiero seguirte la corriente... y me duele. Me duele, enserio. Has vuelto. Prometiéndome que me cojerías de la mano, de nuevo... pero yo ya no quiero, ya he probado las caídas desde el cielo y pueden llegar a ser mortales.
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