A sonreír se aprende habiendo llorado mucho. Cuando te suena demasiado cualquier principio. Cuando deja de sorprenderte cualquier final. A sonreír se empieza en cuanto se aprende a soñar flojito.

jueves, abril 22

Me corto y me abro.

¡TUS OJOS NO TIENEN DUEÑO PORQUE NO SON DE ESTE MUNDO!
Que yo sé que la sonrisa que se dibuja en mi cara tiene que ver con la brisa que abanica tu mirada.

No hay comentarios: