A sonreír se aprende habiendo llorado mucho. Cuando te suena demasiado cualquier principio. Cuando deja de sorprenderte cualquier final. A sonreír se empieza en cuanto se aprende a soñar flojito.

jueves, agosto 19

MONTAÑA RUSA.

Es así, esto sube y baja... dependo de él por completo. Me encantaría poder decirle te odio, no puedo. Deshacerme de esto que tengo dentro de mí, que arde y quema... constantemente. Mi felicidad depende de mi situación con él, de su color de ojos, y de la manera de que me diga ¡hola!. De como me llame, como me hable, y como se despida. De si se preocupa por mi, o es capaz de aguantarme todas las noches de su vida, si tiraría de mi como lo hago yo. O si viviría por mí, como lo hago yo. Si esta triste cuando no le hablo, o si le jode cuando no le miro, si arde por dentro cuando no me acerco a él.... si no llora de alegría. Si sería capaz de dejarlo todo por mí. Si sería sí, o no, o tal vez o con pero o sin él. Si me comería a besos, o si me mataría a mordiscos. Si me esperaría una hora o quizás dos... o dos vidas o dos días. Si se muere por rozar mi piel, o se vuelva tonto con mis pecas. Si me quiere con el pelo recogido o suelto, con o sin maquillaje. Si le gusta mi mirada o mis ojos tal vez, como me encanta ami la suya. Si me espera encontrar ese 'sábado'... o si me busca por aquella verbena. Si tiene planes de futuro. Y si, ¿dejo de pensarlo? quizás bien, quizás mal, quizás le eche mas de menos... o mi mente se consuma soñando con él... tal vez sea más feliz, o menos... porque esto es así sube y baja, como una puta montaña rusa.

No hay comentarios: